País de Origen: Los Ángeles, California - México
Ritmos Explorados: Son Jarocho, ritmos afro latinos, cumbia, hip hop, folk

Se empezaron a formar como grupo en el East Side Café en Los Ángeles-California, explorando sus raíces a través de las enseñanzas del Son Jarocho, expresión musical de la cultura jarocha, en los estados de Oaxaca, Tabasco y Veracruz- México. El son jarocho ha sido una herramienta para el grupo de transmitir y construir autonomía, comunidad, y solidaridad. Las Cafeteras buscan perpetuar la herencia del ritmo y que todo el mundo en cualquier parte pueda acceder a el. Todxs ellxs "chicanxs" hijxs de inmigrantes mexicanos tienen en común su compromiso por el trabajo social y el desarrollo comunitario. Cada uno trabaja desde sus frentes por apoyar las causas que relatan sus canciones.

La energía que comparten en sus canciones a través de ritmos de origen mestizo, indígena y afrolatino en fusión con el hip hop, el folk y otras bases rítmicas, relatan el movimiento de derechos civiles en los Estados Unidos, la reforma migratoria, los femicidios en la Ciudad Juárez, la vida de los trabajadores migrantes y los sueños que unen a tantas familias reunidas en la Diáspora.

En sus presentaciones el bilingüismo esta presente al narran muchas de sus líricas, utilizando el lenguaje como herramienta de poder para llegar a otros públicos. A lxs miembrxs de Las Cafeteras le llamaban "Los Cafeteros," más por confrontar el sistema patriarcal, decidieron adoptar la versión femenina para el nombre del grupo. Su energía renovadora y su compromiso por honrar las historias son su fuerte zapateo.

Canciones de Las Cafeteras en nuestros episodios:

La canción Trabajador Trabajadora es una narración bilingüe muy emotiva de todas las personas que trabajan en labores que muchas veces son invisibilizadas, quehaceres que se toman por sentado, olvidando muchas veces el privilegio que tenemos gracias al sacrificio de nuestros ancestros, familia, y hermanxs que nos ofrecen con sus manos, desvelos y entrega lo mejor de si mismxs.

(lee la traducción de esa canción)

"Yo no vengo a disculparme, mujer soy y lo seré, solo vengo a declararle que quieta nunca estaré". Mujer Soy es un himno de entereza clamando justicia frente a la inequidad, la violencia domestica, los feminicidios y la impunidad de las desapariciones y asaltos sexuales que muchas mujeres enfrentan en la ciudad y el campo en Latinoamérica.

En Ciudad Juárez, lugar donde cientos de mujeres mexicanas se mudan para encontrar trabajo en las maquilas para ofrecer un mejor futuro a si mismas o sus familias, se encuentran con la muerte en un desierto sin testigos. El número estimado de feminicidios hasta el año 2012 registrados asciende a más de 700 mujeres. La expansión de las maquilas y su sistema de mano de obra barata es otro resultado de los tratados de libre comercio. Allí mujeres y niñas trabajan confeccionando, ensamblando y produciendo para grandes emporios.

Como dice Lydia Cacho, periodista de investigación mexicana, quien trabaja incesantemente por denunciar y acabar los vínculos de la clase política mexicana con la pederastia infantil, la pornografía y los feminicidios en el país, "al sistema no le gustan las sobrevivientes, el sistema nos quiere siempre víctimas y sometidas para que recordemos siempre quién tiene el poder". Frase que hace eco no solo en Ciudad Juárez, también en cada ciudad de Latinoamerica donde desaparecen, asesinan mujeres y solo queda el silencio en sus cuerpos y una impunidad que indigna y duele.

Las Cafeteras invocan, invitan y nos empoderan que no seamos calladas, que podamos entrelazarnos y seguir para hablar, caminar y sentir sin miedo a ser mujeres.